Por fin llegó el día, y tras algún que otro contratiempo, al final ya estábamos montados en el autobús camino a al granja "La Bouza". El camino de ida fue algo ajetreado, lo digo por algún que otro mareo, nada que ver con el de vuelta, el conductor hizo del viaje una fiesta, y no nos dio tiempo ni a pensar que ya se había acabado la excursión cuando estábamos de nuevo en el cole.
En la granja, un día estupendo, con muchísimo calor. Las monitoras dividieron a las niños en grupos variados ( de ahí que veáis fotos de muchos niños de otras clases) y entre canciones y risas comenzaron los talleres, de galletas, de manualidades, de juegos, el bosque,... y como no, los animales.
lo que más llamó la atención, o por lo menos eso fue lo que contaron los peques al día siguiente, las avestruces (que además ¿habían puesto un huevo gigante!) y el jabalí, enorme jabalí, ¡ah!, y como no, la comida. Verse allí todos juntos comiendo, se lo pasaron genial.
Lo peor, que esta ha sido nuestra última excursión juntos...claro, que aún nos queda visitar la policía local...
